Solar

QUÉ HACEMOS

Gestionamos proyectos de energía renovable, eólicos y fotovoltaicos, desde la primera idea hasta que terminan su vida útil.

Nuestra pasión es desarrollar proyectos de producción de energía a partir de fuentes renovables, eólicos y fotovoltaicos, desde la fase de identificación de la oportunidad hasta el final de su vida útil.

Conseguir que un proyecto de energías renovables se construya, y llegue a la fase de operación siempre ha sido un trabajo arduo y de muchos años, para lograr el encaje tecnológico y ambiental, y la búsqueda de consenso y adaptación al territorio. A pesar de que las normativas actuales pretenden reducir los plazos de tramitación de los proyectos, lo cierto es que hay que hacer mucho trabajo, y salvar infinidad de obstáculos para conseguirlo. Más allá de la documentación exigible por la normativa para la obtención de la Autorización Administrativa (Proyecto ejecutivo, Estudio de Impacto Ambiental y Paisajístico, Proyecto Urbanístico, Análisis de Afectaciones Agrarias, etc.) la administración, o los expertos con los que trabajamos requieren la elaboración de estudios adicionales para garantizar que los proyectos sean compatibles con diferentes vectores (ambientales, culturales, etc.) que puedan existir en su ámbito de influencia. Para la realización de estos estudios arqueológicos, paleontológicos, de fauna, flora, edafológicos y otros, nos apoyamos en nuestro propio equipo, y en una red de colaboradores de primer nivel, especialistas en cada materia, con los que tenemos larga experiencia de resultado exitoso.

La normativa evoluciona y es necesario adaptar los proyectos en cada momento a los nuevos requerimientos de la administración. Nuestro equipo es lo suficientemente rápido y flexible para resolver los retos que se nos plantean.

Nuestro objetivo es conseguir que los proyectos obtengan todas las autorizaciones necesarias para ser construidos lo antes posible. Sólo así podremos hacer frente como sociedad al cambio climático, las subidas del precio de la electricidad, la dependencia energética del exterior o el cierre de las centrales nucleares.

La experiencia nos demuestra que realizar este trabajo supone que, por diferentes motivos, no todos los proyectos llegan a ser construidos. Haciéndolos cada vez mejores, más integrados en su entorno y en la sociedad, y más rentables, esperamos conseguir que la mayor parte de los proyectos que gestionamos lleguen a la fase de operación.

Oficina Mataró

Nuestro trabajo no termina cuando un proyecto consigue los Permisos, Licencias y Autorizaciones para poder construirse (ready to Build). También ayudamos a nuestros clientes a conseguir la financiación, licitamos las obras, hacemos el seguimiento de la construcción, para que el proyecto se construya dentro de plazo y presupuesto, y con la calidad exigida, conseguimos los permisos finales de obra, y ponemos la instalación en funcionamiento.

Tras la puesta en servicio ofrecemos a nuestros clientes servicios “post construcción”, tanto en el plano jurídico-administrativo (tramitaciones para legalización de las instalaciones construidas), como en el plano técnico, (apoyo a la operación y mantenimiento) como en el de gestión, convirtiéndonos en el equipo local de nuestros clientes.

Durante todos estos procesos hacemos de interlocutores con las administraciones y el territorio, en defensa de los derechos de nuestros clientes.

Disponemos de una dilatada experiencia en la gestión de los permisos de acceso y conexión a las redes de Transporte y Distribución para los proyectos que gestionamos.

Entre nuestros activos se encuentra también un equipo propio de gestión de permisos de terrenos, encargado de obtener los contratos de arrendamiento o compra de los terrenos en los que se implantan nuestros proyectos.

Imatge
Solar

Gestionamos proyectos fotovoltaicos con un rango de tamaños entre 5 y 50 MW. La media de nuestros proyectos es de 25 MW.

Para alcanzar los objetivos marcados por el Pacte Nacional per a la Transició Energètica de Catalunya se calcula que en el año 2050 se necesitará haber instalado 30.000 MW (en 2020 la potencia fotovoltaica instalada en Catalunya era de 345 MW). Dado que cada MW instalado necesita aproximadamente 1,5 ha de terreno razonablemente llano, significa que se necesitan 45.000 ha en total. En la última década se han abandonado 100.000 ha de terrenos de cultivo por motivos que nada tienen que ver con las renovables. Cataluña tiene, según IDESCAT, 828.811 ha de cultivo.

Imatge
Ovelles

Se calcula también que ocupando todos los tejados disponibles para autoconsumo se podría alcanzar cerca de un 30% del objetivo en fotovoltaica para 2050, lo que significa que los restantes 20.000 MW se deberán instalar sobre terreno, ocupando 30.000 ha. De ubicarse todos estos proyectos sobre terrenos de cultivo, que son los mayoritariamente compatibles con el uso fotovoltaico, supondría únicamente un 2,4 % de los terrenos de cultivo actuales, lo que, visto desde otra perspectiva, equivale a usar un 30% de la superficie de cultivo abandonada en los últimos años.

Nuestra principal preocupación a la hora de diseñar nuestros proyectos es su integración con el entorno natural y paisajístico. En todos los casos, las estructuras van clavadas directamente en el suelo, sin hormigón, para no afectar a la calidad del suelo. Este sistema permite una recuperación rápida de las fincas una vez termina la vida útil del proyecto

Imatge
Terròs

Con la intención de crear prados naturales que sirvan de refugios de biodiversidad, prevemos la plantación de especies vegetales salvajes y autóctonas dentro del proyecto, también debajo de las placas.

Estamos desarrollando algunos proyectos de integración entre la actividad fotovoltaica y la explotación agrícola, para mantener cultivos aprovechables (cereales, aromáticas, leguminosas, hortícolas y otros), ganadería, apicultura y otros, en el ámbito de las plantas fotovoltaicas.

Para una mejor integración de los proyectos fotovoltaicos en su entorno proponemos la creación de barreras visuales vegetales, en combinación, o como alternativa a las vallas tradicionales, haciéndolas asimismo más más permeables al paso de fauna.

Integramos y proponemos medidas ambientales correctoras y compensatorias, como la creación de refugios de insectos, murciélagos y pájaros, o el mantenimiento de las lindes arbóreas y arbustivas.